La visión que tengo del mundo es pesimista; la mayor parte de las cosas que nos rodean van mal, desde la justicia hasta la educación, pasando por nuestro egoísmo.
Cada día son más las personas que se unen a asociaciones para proteger el medio ambiente, la publicidad para concienciarnos del mantenimiento de los bosques y los carteles para prevenir los incendios, pero yo me pregunto: ¿es esto suficiente?, ¿somos realmente conscientes del daño que estamos causando?
Pienso que no Son muchos los inconscientes que compran animales exóticos, de bellos colores, como tortugas de Florida, por ejemplo, que luego se les escapa o simplemente los sueltan porque se han hecho demasiado grandes. Esta acción es la culpable de que nuestras especies autóctonas ( como la malvasía cabeciblanca, o la tortuga occidental…) estén en peligro de extinción.
Pero esta no es la única causa. También podríamos mencionar la construcción de carreteras, autopistas, nuevas ciudades… que hacen que los bosques desaparezcan o sean fraccionados. Un ejemplo típico de animal en peligro de extinción a causa de estas construcciones es el lince ibérico. Son también muchos los inconscientes que utilizan el coche para ir a escasos 100 metros de distancia, en vez de ir andando o en bicicleta; otros muchos utilizan colonias o desodorantes en sprays, en lugar de utilizar tarros o roll on. Y, lo que es peor, son muchas las personas que piensan que son cosas sin importancia y que no influyen en el medio ambiente. Pero granito a granito se construye una montaña y, cuando eso ocurre, ya no hay solución.
Emilia García. (2ºC BACH)
No hay comentarios :
Publicar un comentario